CONSECUTIVOS. Retroceso a julio es de un 4,5 %, informó Fedeleche, que lo atribuye al aumento de importaciones, así como a bajos precios pagados por la industria.

Durante los primeros siete meses de 2018, la recepción de leche fresca en la Región de Los Lagos muestra un desempeño negativo consecutivo, por lo que acumula un retroceso de un 4,5% respecto de 2017, equivalente a 24,6 millones de litros.

Los datos fueron aportados por Eduardo Schwerter, presidente de Fedeleche, quien detalló cómo ha variado el aprovisionamiento de leche por mes. En enero se registró una baja de -1,9%, en febrero se observó una caída de -3,5%, mientras en marzo fue de -10,5% (la mayor del año). La tendencia no varió en abril, cuando hubo un retroceso de -5,9%; en mayo la disminución fue de 3,6%; y en junio y julio se llegó a un 1,3% y 3,6%, respectivamente.

Schwerter, quien también preside Agrollanquihue, precisó que esos datos reflejan no sólo el impacto del clima, sino que revelan que el comportamiento de las importaciones y su participación en el mercado interno está sustituyendo a la producción nacional.

«Vemos con preocupación como, por ejemplo, Prolesur, la principal empresa importadora de lácteos en Chile, ha aumentado esos volúmenes y, al mismo tiempo, ha bajado la compra de leche chilena», afirmó el productor puertovarino.

Menos precios

El líder gremial recordó que fue la propia Prolesur, que en una medida inédita por el periodo en que se conoció, anunció una baja de 17 pesos por litro en el precio de compra al productor primario, lo que para el personero representa el daño ocasionado por las importaciones y que tiene su correlato en una menor producción de leche en Los Lagos.

Según la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), la región es la zona con el menor precio promedio pagado por la industria, con un valor de referencia de $228,9 por litro, $8,7 menos que la media nacional, acumulando cuatro meses consecutivos a la baja.

El dirigente aseguró que en los últimos años muchas lecherías han debido cerrar «debido a la menor recepción de leche por parte de la industria, la que -por el contrario- ha incrementado sus importaciones».

Schwerter dijo que esta caída en Los Lagos (donde se produce el 50% de la leche del país) ha derivado a una baja nacional, ya que este año «la recepción en Chile muestra un retroceso de un 0,8%».

Aseguró que la lechería es uno de los principales motores productivos del sur, y esperan que las autoridades «dimensionen el riesgo al que nos enfrentemos, con una alta participación de importaciones y un suministro a la baja en términos de producción nacional».