Al no obtener el respaldo ciudadano, la propuesta de nueva Constitución no seguirá avanzando, lo que representa «una nueva oportunidad para Chile», sostuvo Héctor Henríquez, presidente de la Multigremial de Los Lagos. El también timonel de Armasur, admitió que el país aspira a tener una nueva Carta Magna, pero que «no era esta», que -aseveró- «no representaba el sentir, el deseo, ni lo que necesita Chile. Terminó dividiendo, más que uniendo».

Henríquez espera «que se cumplan los compromisos, que permitan construir una nueva y buena Constitución», para lo que pidió hacerlo «en un proceso lo más rápido posible» y que considere artículos de la propuesta presentada. Admitió que ese documento generaba incertidumbre, lo que «no es buen aliado de la inversión y del crecimiento económico». Observó que «marcar diferencias entre quienes tienen más derechos sobre otros, por el hecho de haber estado antes, no me parece que sea un buen criterio. Deben ser que todos tengamos las mismas oportunidades, igualdad de opciones de desarrollar alguna actividad».

El líder de la Multigremial recordó que estaban en desacuerdo con dar cabida a un «Estado empresario, lo que es fatal especialmente para las pequeñas y medianas empresas que no iban a poder competir con el aparataje estatal».

Remarcó que «esas son algunas cosas que hay que arreglar dentro de otras que no abordó la Constitución, que son las que quiere la gente, como el sistema de pensiones y la salud. Hay hartas cosas que trabajar para que tengamos una buena Constitución».

 

LIQUIDACIÓN SIN RECURSOS

El presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Puerto Montt, Eduardo Salazar, resaltó que «hubo sentido común de los votantes, que fue transversal (…). Todos aprendimos la lección. Menos mal que primó la cordura del pueblo de Chile».

Anticipó que el desafío próximo es llegar a un acuerdo «y juntos hacer una nueva Constitución, en la que el centro sea la persona y dejar los revanchismos. Hay que buscar lo mejor para el país», postuló. El líder gremial afirmó que «no ganamos nada con ofrecer liquidaciones, si no hay recursos para comprar. Chile tiene que crecer, tiene que haber inversión, desarrollo, libertad para que el país funcione, para todos por igual».

En cuanto a las expectativas en la economía, Salazar resaltó que «va a volver la inversión, pero tenemos que ofrecer garantías de que el país va a estar ordenado. Hay que unirse para sacar al país adelante». Afirmó que cuando se recupera la confianza «se produce una reactivación económica». Al reflexionar sobre el futuro próximo, advirtió que «van a venir momentos difíciles, pero los vamos a salvar mejor que si hubiésemos estado divididos como hasta antes del plebiscito del domingo».

 

BUSCAR ACUERDOS

De su lado, Francisca Sanz, presidenta de la Delegación Puerto Mona de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), subrayó que se debe reconocer la decisión de la ciudadanía y dar inicio a un nuevo proceso constitucional, «rescatando los elementos positivos de la propuesta y corrigiendo los aspectos que nos dividen». En esta tarea, agregó, existe «el desafío de acercarnos a una Constitución que todos sintamos como propia y ayude a construir un mejor país».

La lides local de la CChC anticipó que «como gremio nos ponemos a disposición de todos los que aspiren a este mismo objetivo, para trabajar en conjunto», para lo que se comprometen a ser «promotores del diálogo, la colaboración y la construcción de acuerdos en favor del bien común», ya que «solo así podremos superar con éxito las crisis que enfrentamos, encontrar las mejores respuestas frente a las necesidades y demandas de las personas, y crear las condiciones para que nuestro país avance por el camino del desarrollo social y económico sostenible».

 

MIRADA DE FUTURO

Mientras que Joanna Davidovich, directora ejecutiva del Consejo del Salmón, consideró que ante el contundente resultado del plebiscito, «Chile quiere que se inicie un periodo de unidad nacional que permita, a través del diálogo y los consensos, generar las condiciones para construir en conjunto una senda de progreso económico y social sostenible».

Para ello, postuló la necesidad de lograr un acuerdo transversal amplio «que contribuya a reducir la incertidumbre, da confianza y avanzar en un marco moderno con mirada de futuro, que permita reimpulsar la inversión, el crecimiento y el empleo».

Davidovich dijo esperar que en ese proceso se incluya al sector privado para saber qué requieren los sectores productivos e impulsar cambios «de manera responsable y sensata, para avanzar en un mejor país para vivir».

Expresó que en la salmonicultura existe disposición a trabajar «constructivamente para impulsar la actividad, el emprendimiento y toda la cadena de valor que genera esta actividad, para avanzar hacia el desarrollo sostenible de las regiones del sur de Chile».

 

TRABAJAR EN PAZ

En tanto que Eduardo Schwerter, presidente de Agollanquihue, destacó la agilidad del proceso electoral ante una alta participación.

Tras este resultado estimó que ahora deberían ser atendidos a los agricultores «de forma seria y respetuosa, ya que en el proceso anterior no fuimos considerados por la Convención Constitucional, a pesar de que participamos en todas las instancias previas e hicimos todos los esfuerzos por hacer ver que la agricultura es una actividad estratégica y esencial, prioritaria en nuestro país».

Schwerter especificó que es importante entender que los agricultores no sólo necesitan agua, fertilizantes y tima para producir alimentos, sino que «necesitamos trabajar en paz en nuestros campos. Para ello se requiere de una Constitución que refuerce el Estado de Derecho y reconozca la significativa y crucial labor que ejercen los apicultores para el desarrollo del país».

 

Fuente: El Llanquihue