En Brasil están preparando una propuesta de regulación del mercado de productos de origen vegetal en el que se ha producido una reestructuración después de que el actual ministro de Agricultura, Marcos Montes, haya pedido la prohibición del uso de términos como «carne, leche, hamburguesa y queso» para aquellos alimentos que no son de origen animal.
En agosto, Montes envió sendas cartas a los ministerios de Sanidad y Justicia en las que solicitaba la «restricción urgente de las etiquetas y marcas que utilizan indebidamente el nombre de productos tradicionales de origen animal en productos de origen vegetal». El texto dice que «utilizar los mismos nombres para designar productos vegetales, que tienen características diferentes y valores nutricionales distintos, induce a error al consumidor». Para el ministro, el consumidor puede «pensar que está adquiriendo un producto conocido con las mismas características, lo que no es cierto», informa el diario brasileño Valor.
Una nota técnica del Ministerio fue más contundente y pidió que se restrinja el uso de términos tradicionales en los productos de origen vegetal, aunque vayan acompañados de las expresiones «plant-based» o «vegan». El documento critica, por ejemplo, las denominaciones de artículos como «crema de arroz», «queso vegano» y «mantequilla de coco».
Los pequeños y medianos mataderos -que, a diferencia de las grandes empresas cárnicas, no invierten en proteínas alternativas- y los productos lácteos también temen perder cuota de mercado frente a los productos vegetales que utilizan la nomenclatura «tradicional». Estos segmentos celebraron la posición que el ministerio adoptó en la carta y la nota técnica.
«El vacío legal abre la posibilidad de abuso y mal uso de la nomenclatura, además de aumentar las posibilidades de solicitudes de inspección y confiscación de productos ya ampliamente comercializados», dijo a Valor una persona familiarizada con las discusiones. Se critica que el debate se ha vuelto más «político» que «técnico». «El intento de regulación ha dado dos pasos atrás», dijo.
El ministro Marcos Montes pidió posiciones técnicas a la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), vinculada al Ministerio de Salud, y a la Secretaría Nacional del Consumidor, del Ministerio de Justicia, que aún no han respondido oficialmente. También sugirió la creación de una norma conjunta para regular el sector vegetal que contemple «nuevos términos para estos productos distintos», citando el ejemplo de la «diferenciación bien establecida en la sociedad brasileña» entre la mantequilla, de origen animal, y la margarina, de origen vegetal.
En los documentos, el principal argumento del ministerio es que utilizar en los productos de origen vegetal los términos que ya bautizan a los de origen animal puede confundir al consumidor.
FUENTE: Eurocarne.com